Fernando Mieles: “El cine es una carrera de resistencia”
Director guayaquileño estrena por fin, en agosto, su película Prometeo Deportado, cuyo proceso le tomó 10 años desde su concepción.
La película ecuatoriana Prometeo Deportado, del cineasta guayaquileño Fernando Mieles, se estrenará por fin la última semana de agosto próximo, tras un largo proceso de diez años desde su concepción y a dos de su rodaje. Quince actores protagónicos y “ciento cincuenta extras en progresión constante” participaron en esta historia coral sobre la migración, que contó con un presupuesto aproximado de 800 mil dólares. Así lo informó Fernando Mieles, su director y guionista, en una charla sobre El cine que se hace en Guayaquil, la noche del pasado martes, en el Teatro Centro de Arte. El conversatorio fue conducido por Jeannine Zambrano y contó con la participación de Andrés Crespo, quien arrancó risas al público con sus ocurrencias y habló de uno de sus cortos experimentales.“El cine es una carrera de resistencia”, soltó Fernando Mieles, de 40 años, quien se declaró un apasionado del celuloide. “Cada proyecto (que se realiza en Ecuador) puede tomarte entre tres a seis años. El cine demanda una filosofía de espera y de paciencia muy grande, un esfuerzo y un nivel de compromiso extra. Prometeo... me llevó 10 años. La pregunta es ¿hasta qué punto la gente está dispuesta a hacer este sacrificio?”.Ese tiempo de espera contribuyó, no obstante, a la madurez del proyecto, comentó el realizador. El texto que ganó el premio a Mejor Guión Inédito en el Primer Festival del Cine Pobre en 2003, Gibara, Cuba, “era la tercera versión, el que se filmó fue la versión dieciocho”.El primer tráiler de Prometeo..., que se exhibió al término del conversatorio del martes, ya se proyecta en salas comerciales de cine y se puede ver en la página YouTube. En él se observa al actor y narrador oral Raymundo Zambrano con voz en off. “Si el Ecuador es el nombre de una línea imaginaria, los ecuatorianos somos seres imaginarios. (...) El Ecuador no existe, pero duele”. El promocional prefigura ya el tono de la cinta, muestra a un grupo de ecuatorianos esperando ser deportados en un aeropuerto de una ciudad no determinada del primer mundo. Entre ellos aparece Prometeo, “el mejor mago prestidigitador, mentalizador, escapista de todo el Ecuador”.Según Fernando Mieles, quien ya estrenó el año pasado el documental Descartes, él filma películas por una necesidad expresiva. “Yo hago cine para conocerme”, señala. De hecho, Prometeo... aunque “no es un filme autobiográfico”, sino construido por pequeñas historias que confluyen en una sala de espera, partió de una experiencia personal. “Me deportaron de España en el 93”. El realizador ha señalado que también encontró inspiración en la tragedia griega, en el Prometeo encadenado de Esquilo al momento de trazar esta alegoría sobre la ecuatorianidad.Ahora Mieles espera que los ecuatorianos asistan a ver la película masivamente. “Yo hago películas por la necesidad de verme yo mismo, que mi familia y mis vecinos vean cómo somos, no para que me validen en un festival, que por lo general es lo que pasa”.
Alexander García Vizcaíno.- Publicado en Expresiones de Diario Expreso (3/05/2010).